Exportación 2.0

Pasa a la Acción

Si eres una empresa industrial que vende sus productos a otras empresas, tanto a nivel nacional como internacional, probablemente podamos ayudarte.

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Las redes sociales se han convertido en todo un fenómeno de masas pero también podemos hacer de ellas un potente medio de promoción de nuestras exportaciones si sabemos sacarles el máximo partido.

 

Escoger la adecuada

Para ello, debemos tener en cuenta tres aspectos: el tipo de público al que nos dirigirnos, el área geográfica, y las características de cada una de las redes sociales, para poder adaptar mejor nuestra estrategia de comunicación comercial.

En cuanto al público que nos vamos a dirigir, hay que tener clara una estrategia de segmentación de públicos que sirva a nuestra estrategia de comunicación. Por ejemplo, si queremos apoyar una acción promocional de un distribuidor nuestro en una ciudad de Europa -una degustación de producto en su tienda- la mejor opción es escoger una red social de carácter general, como puede ser Facebook, ya que el público al que nos dirigimos es el consumidor final. Pero imaginemos que nos dirigimos a otros distribuidores en ese país; en esta ocasión deberemos usar otro tipo de red social más adecuada al ámbito  profesional, como puede ser Linked In.

El área geográfica donde queremos desarrollar la promoción es también un factor a tener en cuenta a la hora de escoger a qué red social debemos dirigirnos. Hay que saber que no todas las redes sociales tienen la misma implantación en todas las áreas del mundo y esto nos puede obligar  a cambiar de red social dependiendo del país al que nos dirigimos. Pongamos por caso que nuestra promoción la llevamos a cabo en occidente; muy probablemente escogeremos entonces Facebook, si nos dirigimos al consumidor final, Linked In para profesionales. En cambio, si nuestra acción profesional la llevamos a cabo en un país asiático, puede que nos interese más trabajar con redes sociales más implantadas en Asia como son Qzon en China  o Cyworld en Corea.

Adecuar el mensaje. ¿Qué es lo que queremos transmitir? ¿Cuál será el mensaje? No es lo mismo dirigirnos a una comunidad de consumidores finales, donde por ejemplo los aspectos más técnicos no son relevantes, que dirigirnos a un grupo de compradores profesionales que están interesados en conocer otros aspectos de nuestro producto. Por lo tanto debemos adaptar el mensaje y, obviamente, expresarnos en el idioma del país, obligatorio cuando se trata de público en general; podemos escoger el inglés para el público más profesional. Es recomendable contar con la ayuda de un buen traductor que evite un uso poco adecuado del idioma y haga perder efectividad a nuestra comunicación.

Actualice y comparta

Por último, no olvide que las redes sociales están para compartir. Por este motivo es necesario alimentar nuestros perfiles, ser activos en nuestras comunicaciones. En el caso de las redes más profesionales, proveer de contenidos interesantes y de calidad a nuestros contactos pero sin llegar a agobiar.

Entendemos que puede requerir un trabajo extra, pero causa muy mala imagen encontrar perfiles de empresas que están totalmente abandonados, que nadie ha escrito un post o una entrada desde hace meses o incluso años. Por lo tanto tengamos en cuenta que si nos damos de alta en una red social, el resto espera de nosotros un mínimo de actividad de calidad, de lo contrario el resultado puede ser muy distinto al deseado.