Y esto es así porque el marketing es fundamentalmente una herramienta de comunicación y la comunicación no es algo a lo que nos podamos conectar o desconectar a nuestro antojo o que puedan hacer unos y otros no. Todo comunica y lo hacemos a todas hora eso significa que desde el CEO de la empresa hasta el último empleado de la misma, todos deben tener claro que comunican y que parte de la construcción de marca es responsabilidad de ellos.
Si analizamos la cantidad de ocasiones que una empresa entra en contacto con sus clientes o posibles clientes veremos que solo un porcentaje de esas ocasiones el contacto viene directamente por el departamento comercial o marketing que son sobre los que solemos hacer recaer toda la responsabilidad en el área de comunicación.
Por esta razón hay muchas empresas que viven en una permanente contradicción entre lo que “comunicación oficial” y la «comunicación real «de las mismas. Es decir, hay una versión oficial de la empresa que no coincide para nada con la que perciben los clientes en base a su experiencia real.
La manera que tenemos de evitar este tipo de situación es la de trabajar en el marketing interno, es decir, en comunicar internamente a todos los miembros de la empresa los valores de la misma y los objetivos que nos marcamos para comunicar en el exterior. Para ello vamos a necesitar un manual de marketing donde se expliquen claramente; los objetivos de posicionamiento de marca de producto y de marca empresa, la estrategia de marketing que debe estar muy clara para todos, como debemos transmitir estos valores en nuestro día a día.
Además, este manual debe “personalizarse” de manera que cada departamento ponga atención a aquellas actividades que ellos realizan en su día a día y donde deben tener un especial cuidado, de manera que recibe instrucciones precisas de cómo actuar, de lo que tiene que hacer y evitar.
No es suficiente con que los empleados tengan una ligera idea de los valores de la empresa, sino que los deben asumir de manera natural, hacerlos suyos, es la única manera de que luego “les salga de forma natural” no es necesario pensar las cosas porque se tiene interiorizadas, son parte de la cultura de la empresa y por lo tanto se transmiten hacia el exterior de manera natural.
Una vez la organización está en disposición de asumir esos valores y sabe cómo transmitirlos en su día a día, seremos capaces de hacerlo de manera efectiva hacia el exterior. Así que no olvidemos que un buen plan de marketing comienza por una buena comunicación interna y porque la organización asuma el reto.
Bernardo Abril
babril@globalexportise.com