En otras ocasiones hemos hablado de como nuestros clientes suelen parecerse a nosotros o mejor dicho como somos nosotros los que terminamos por parecernos a ellos, la verdad es que no sé muy bien que fue primero si el huevo o la gallina pero desde luego lo que si que tengo claro es que todas las empresa terminan por trabajar con otras empresa que se asemejan bastante a ellas. Cuando escucho a un comercial quejarse de algún cliente o algún gerente lamentándose de que sus comerciales no logran vender a empresas con mayor nivel siempre me pregunto porque está sucediendo esto.
Al final nos damos cuenta de que si no podemos aspira a mejores clientes también es porque nosotros mismos no nos hemos planteado en serio y trabajado para conseguirlo ponernos a la altura de esas mejores empresas y lograr que nos perciban como un proveedor de su nivel. No te equivoques, si tus clientes son unos chapuzas, muy seguramente tu empresa también lo es, nos guste o no.
Cada uno busca un determinado posicionamiento en el mercado y por lo tanto busca también proveedores que lo estén o que les ayuden a estarlo, si el posible cliente no percibe que nosotros nos encontramos en disposición de ofrecer el nivel requerido , no será extraño que no nos consideren como posible proveedor.
No es extraño que las mejores empresas solo aceptan trabajar con los mejores porque saben muy bien que rodeándose de buenas empresas es parte de su éxito, si nos rodeamos de los mejores, estos nos aportarán más y por lo tanto seremos mejores empresas.
Si os dais cuenta es una cuestión de generar un entorno a nuestro alrededor de empresas que contribuirán con su esfuerzo a que seamos más competitivos. Yo siempre he pensado que una buena parte del éxito de una empresa se lo debemos a nuestros proveedores y al esfuerzo que ellos hacen en servirnos.
Al final , cuando valoramos nuestra empresa no solo lo hacemos por nuestros clientes sino también por nuestros proveedores, así que a todos nos gusta contar con proveedores de los que nos podamos sentir orgullosos, este es el motivo por que el muchas empresas se estrellan contra el muro del silencio y la desesperación cunde entre las filas del departamento de exportación.
Al final todo se reduce a una cuestión de estándar de empresa, si aspiramos a mejora la calidad de nuestros clientes vamos a tener primero que mejorar nuestra propia organización, pero no me refiero a nuestro aspecto exterior, no es labor única del departamento de marketing o comunicación de la empresa, sino de toda la organización.
Si aspiramos a mejores clientes, lo fundamental es mejora nosotros primero, ,ganarnos la posibilidad de ser respetados por los mejores y tenidos en cuenta por aquellos a los que tratamos de atraer y entonces comenzar el trabajo que nos llevará a ser confirmados como empresas merecedoras a ser sus proveedores.
Así que antes de quejarte de tus actuales clientes , mírate al espejo y pregúntate que haces tu trabajando con ellos y si tal y como esta tu empresa puedes aspirar a algo mejor sin hacer cambios primero en tu empresa.
Bernardo Abril
babril@globalexportise.com
