Julio y agosto son meses considerados por muchos como poco productivos para el trabajo comercial , en muchas ocasiones los responsables de compran toman vacaciones y esto supone una ralentización de las operaciones de compra y por lo tanto pensamos que es un tiempo muerto para nosotros.
Pero en cambio estos meses de verano pueden aprovecharse y sacarle partido para realizar otro tipo de acciones de caracter comercial que puede que no estén relacionadas directamente con la venta pero que tienen su importancia en el proceso comercial.
¿Cómo podemos aprovechar estos meses?, hay ciertas tareas que son apropiadas para este tiempo de vacaciones y cierto relax en las empresas, aquí os dejo algunas propuestas.
Aprovecha para hablar con ese responsable de compras que está siempre tan ocupado el resto del año. Durante estos meses el trabajo en muchas empresa suele disminuir , el numero de reuniones en las empresas así que muchos responsables de compras se encuentran más libres para atender nuestras llamadas incluso tienen más tiempo para estudiar nuestras propuestas. Lo que en otras épocas del año parece una misión imposible, puede que los encontremos mucho más receptivos.
Obtén información de valor. También podemos aprovechar para averiguar cuestiones de otra índole, como por ejemplo cuando estamos completando una base de datos de posibles clientes y queremos saber el nombre de las personas a las que necesitamos dirigirnos. Resulta curioso ver como las implacables telefonistas que tanta guerra nos dan durante todo el año y tan complicada nos hacen nuestra labor ahora están más receptivas a darnos este tipo de información.
Para una empresa que comienza ahora su labor comercial en exportación es un buen momento para llamar y averiguar, muchas veces puede que no encontremos al responsable pero nos servirá para confirmar su nombre y datos de contacto, de esta manera iremos preparando la base de datos que comenzaremos a trabajar cuando finalice el verano y volvamos al ritmo habitual de trabajo.
Aprovecha para darle un repaso a temas pendientes que tenemos encima de la mesa y planificar el trabajo de los próximos meses. La bajada de actividad comercial podemos aprovecharla para repasar lo que hemos hecho durante los últimos meses y el trabajo que nos queda pendiente, priorizar y planificar. Así cuando volvamos tras nuestras vacaciones , ya sabemos por dónde empezar y evitaremos perder unos días muy valiosos.
En definitiva, que llegue el verano y se ralenticen las operaciones de compra no significa que debamos bajar el ritmo de nuestra actividad comercial, el verano nos o puede dar la oportunidad de hablar con nuestros clientes o posible clientes de manera más relajada, elaborar o completar nuestra base de datos comercial o planificar el trabajo que haremos cuando regresemos de nuestras merecidas vacaciones.
Bernardo Abril
babril@globalexportsie.com
