El nivel de competitividad de nuestra empresa viene determinado por factores que podríamos clasificar entre ; internos y externos. Los factores internos son todos aquellos que nos hacen ser más competitivos, obviamente coinciden con la lista de “lo que mejor sabemos hacer” pero no nos podemos quedar ahí. Debemos además tener claro que nuestra labor como directores de exportación es encontrar el lugar o mercado donde estas competencias son más apreciadas.
Encontrar el mercado adecuado es fundamental y esta importancia explica como empresas que tienen un éxito aceptable exportando a un determinado país no logran los mismos resultados en otros incluso invirtiendo más recursos. Cuando hacemos una análisis de lo que está ocurriendo nos encontramos con que su entorno competitivo es diferente y por lo tanto sus resultados también.
El entorno competitivo es la otra cara de la misma moneda, por un lado nuestras competencia internas y por el otro las condiciones competitivas de un mercado determinado. Por esta razón una de las principales responsabilidades de un director de exportación es la de conocer muy bien las posibilidades competitivas de su empresa y encontrar aquellos mercados donde estas encuentran una mejor posibilidad para desarrollarlas y triunfar.
Todos funcionamos mejor bajo una serie de circunstancias. Esas circunstancias son las que tenemos que tener siempre en cuenta y procurar que cuando nos lanzamos a competir , el entorno se acerque lo máximo posible a las circunstancias ideales. Ya sé que en muchas ocasiones es imposible competir en las mejores condiciones pero debemos acercarnos a ellas lo máximo posible.
Contar con un sistema de vigilancia o monitorización de esas circunstancias resulta tremendamente práctico en nuestro día a día sobre todo ahora que los entornos competitivos se mueven en ocasiones a gran velocidad.
¿Cuáles son esas circunstancias que pueden afectar a nuestro nivel de competitividad?. Pon gamos por caso que somos una empresa que cuenta como uno de sus factores de competitividad el precio. En este caso una circunstancia externa que deberíamos tener en consideración puede ser un alza en el precio de las materias primas, parece obvio, pero también otros que no estan tan directamente ligados a un sector determinado como la modificación al alza o a la baja de los aranceles de importación de nuestros producto o de nuestros competidores.
Esa variación podría afectar a nuestro factor precio y por lo tanto modificar nuestra posición en el mercado.
En sectores con un componente tecnológico importante es imprescindible mantener vigilados algunos factores como el registro de patentes o publicaciones sobre nuevos avances tecnológicos o de desarrollo de producto, pero en los últimos tiempos otros sectores de corte más tradicional esta necesidad comienza a ser también de obligado cumplimiento. Sectores como por ejemplo el textil o el calzado donde tradicionalmente se dividían en dos grandes temporadas ahora se exige que las empresas tengan suficiente capacidad de reacción para ser capaces de sacar nuevas colecciones en muy pocos días.
Las empresas que no se garantizan los mecanismos adecuados para estar al corriente de los cambios o necesidades que ocurren en su entrono competitivo compiten en franca desventaja con aquellas que son capaces de tener una idea clara de lo que demanda el mercado y se anticipan de esta manera a sus competidores.
Bernardo Abril
babril@globalexportise.com