Así de sencillo era hace diez años y así de sencillo sigue siendo ahora. Continuo viendo a muchas empresas o empresarios que “no quieren líos” , cuando piensan en exportación lo hacen desde la perspectiva de las ganancias, los beneficios, de acercarse a alguien para obtener algo eso si , sin “mareos”.
Pues ocurre que eso es prácticamente imposible a no ser que estemos realizando exportaciones indirectas, vamos que nos compran más que vendemos, y a un así lo veo ,muy difícil.
Exportar en vivir continuamente fuera de nuestro área de confort, puesto que esa manera la delimita el mercado que está compuesto por múltiples agentes ; clientes, competencia, marco regulador, fluctuaciones o cambios en la moneda, etc. Por este motivo las empresas que quieran estar en exportación de manera exitosa deben acostumbrarse a vivir de manera continuada fuera de nuestra área de confort.
Cuando hablamos de adaptación a los mercados, de vivir volcados en las necesidades de nuestros clientes, de ser competitivos, de continuar avanzando para crecer en exportación, hablamos exactamente de estar inmersos en un proceso de mejora continuada que nos obliga a situarnos no fuera del área de nuestra área de confort , sino dentro del área de confort de nuestro cliente.
Es ahí donde debemos vivir, cerca de nuestros clientes actuales y futuros, es ahí donde se nos espera, dispuestos a pagar el precio que debamos pagar como organización pues los retornos que obtendremos siempre serán superiores al sacrificio que realizamos.
Por este motivo necesitamos diseñar estrategias comerciales y de marketing pensando en el aporte de valor que realizamos al mercado y no en lo que nos pueda suponer a nosotros satisfacer las necesidades de nuestros clientes. SI nos movemos con egoísmo, obtendremos lo mismo por parte de ellos. Si solo vemos nuestras necesidades no esperemos que ellos satisfagan las nuestras. Aquí cada uno es mayorcito para saber en relación a los que estamos dispuestos a dar lo que nos podemos permitir recibir.
Desconozco donde estará ahora, hace ya diez años de aquello, aquel empresario supongo que si no cambio de actitud andará en otras cosas, muy seguramente consumido por la crisis , espero que no sea así que al final encontrará el suficiente arrojo para vivir continuamente fuera de su área de confort.
Bernardo Abril
babril@globalexportise.com