Riesgo país y geopolítica. En muchas ocasiones escuchamos estos conceptos con cierta distancia, pues nos parecen muy lejanos a nuestro día a día.
Suelen ser palabras que oímos sobre todo en los medios de comunicación cuando se desencadena un conflicto local o internacional.
¿Pero sómos conscientes de hasta qué nivel nos pueden afectar? ¿Sabemos prevenirlos o al menos alejarnos de ellos? Estos días estamos viendo los acontecimientos que se están desarrollando en Ucrania, que no es un país lejano y nos puede servir de ejemplo ilustrativo a como estos conceptos nos pueden afectar realmente.
El Impacto del Riesgo País en las Actividades Comerciales
Cuando por ejemplo, oímos hablar de sanciones económicas, las que están barajando imponer la Unión Europea a Rusia, nos dicen que puede haber una reducción de visados de ciudadanos Rusos a la UE. ¿Sabemos que esto puede afectar directamente al sector turístico de nuestro país o a las inversiones inmobiliarias que ciudadanos rusos están haciendo en zonas de España, como en la costa mediterránea, o simplemente supongan un retraso en el proyecto que ahora mismo tenemos en marcha allí?
Por otra parte, en otras ocasiones la geopolítica ayuda a establecer nuevas relaciones comerciales donde antes resultaba casi imposible, como recientemente la visita de nuestro ministro de asuntos exteriores a Irán, un país que hasta hace bien poco era considerado un estado terrorista y donde era muy complicado hacer negocios para empresas europeas.
Esta apertura de relaciones beneficia, no solo a los grandes que por su propia capacidad llegan antes que nadie y suelen llevarse la mejor tajada (a veces pagan los platos rotos como ha sido el caso de Repsol en Argentina), sino también a pymes que aprovechan esta apertura para abrir mercado donde antes no era posible.
Estos son algunos ejemplos de cómo algo que parece tan lejano a nuestro trabajo, puede condicionarlo de manera muy importante. Pero, ¿cómo podemos conocer los riesgos e intentar no meternos en “jardines”?
Hay algunas herramientas que nos permiten conocer la situación de algunos países y los riesgos que corremos si decidimos, no solo implantarnos, sino también hacer acciones comerciales como viajes de prospección, intentar prever si obtendremos un seguro de cobro o simplemente si nuestro cliente será capaz de aperturar una carta de crédito.
En estos casos, sobre todo los que suponen inversiones productivas, yo siempre aconsejo en primer lugar acudir al ICEX y a sus oficinas comerciales en cada país. Nadie mejor que ellos para advertirnos de peligros y darnos información sobre el terreno.
Otras fuentes de información valiosa son:
- COFACE con sus mapas de riesgo y clasificaciones por países
- The World Factbook de la Agencia Nacional de Inteligencia de los Estados Unidos
- Información que da el Banco Mundial en su publicación Doing business
- OCDE y su una interesante clasificación de riesgo de cobro y créditos sobre países
Es verdad que en ocasiones estas cosas son imposibles de prever, pero también es verdad que el que más se acerca al fuego, más posibilidades tiene de quemarse.
Hace ya un tiempo, cuando en Libia gobernaba el Coronel Gadafi, me llamo un fabricante de persianas que quería que le ayudara a exportar a Libia. Mi primera reacción fue preguntarle si no había encontrado un país peor para empezar a exportar; era “primerizo” en esto de la exportación. Le dije que para nada le aconsejaba entrar en un país que hasta hacia poco tiempo su líder era tachado de terrorista por occidente y donde además no existía seguridad jurídica.
Desconozco si me hizo caso, pero a los pocos meses estallo la revolución en Libia, Gadafi fue asesinado y muchas empresa españolas tuvieron que sacar a su empleados del país pues su seguridad física se vio comprometida por los acontecimientos.
En el caso de Libia, no es que yo fuera adivino. No tenía ni idea de lo que ocurriría más tarde, pero sí que tenía claro que era una zona caliente del mundo, con un riesgo país elevado y que aunque la perspectiva de beneficios fuera alta, hay que también considerar los riesgos y ver si nos merece la pena continuar.
En resumen, mi consejo es que no deje que la geopolítica o el riesgo país le amargue una buena operación. Conocer los riesgos le evitará incertidumbre, problemas e inversiones ruinosas.
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Bernardo Abril
Director de Globalexportise – Exportaciones y Marketing Digital Internacional
babril@globalexportise.com
